Un enemigo silencioso se oculta en objetos de uso cotidiano que lentamente van contaminando nuestro entorno cotidiano y finalmente ingresan en nuestro organismo. Se trata de las llamadas sustancias perfluoradas y polifluoradas (PFAS, en inglés), unos compuestos que ya se conocen como ‘contaminantes perpetuos’ o chemical forever, dado su carácter prácticamente indestructible. Ahora, un estudio ha determinado por primera vez el alcance global de las PFAS y España figura entre los países donde más están afectando a la población. El problema es mayor de lo que se creía hasta ahora, según dicha investigación.
Desde osos panda hasta leones marinos o tigres, cientos de especiecs de vida silvestre están siendo contaminadas por estas sustancias químicas perpetuas. Un estudio del Laboratorio del Proyecto PFAS del Grupo de Trabajo Ambiental (EWG) revela que más de 300 especies salvajes contienen rastros de estas PFAS. Pero el ser humano sufre también sus consecuencias, porque estos contaminantes han llegado a la sangre y la proporción de población europea que acumula dichas sustancias en su organismo resulta ser significativamente elevada.
La investigación realizada en Europa, que es donde más datos disponibles hay sobre este problema, revela que las PFAS están presentes en al menos 17.000 enclaves del continente, de los que más de 2.000 están clasificados como peligrosos para la salud humana. El informe estima que las PFAS suponen una carga de decenas de millones de euros para los sistemas sanitarios europeos cada año. Este tipo de sustancias aparecieron en la década de 1940. De ellas, la más conocida es el teflón, utilizado comúnmente para utensilios de cocina antiadherentes.
Se trata de una contaminación que está presente en el aire, el agua y el suelo, y se ha demostrado científicamente que presenta riesgos para la salud, incluyendo el cáncer, para los humanos.
Situación peor de lo que se suponía
El análisis realizado a lo largo de varios meses por 18 entidades europeas agrupadas en ‘The Forever Pollution Project’ demostró que Europa está mucho más contaminada por PFAS de lo que se creía anteriormente, y que costará decenas de miles de millones de euros liberar la naturaleza de estos químicos peligrosos.
“No se degradan en el medio ambiente y son muy móviles, por lo que pueden detectarse en el agua, el aire, la lluvia; animales como la nutria o el bacalao; huevos cocidos y también los seres humanos”, señalan los investigadores.
El estudio localizó 20 productores de PFAS en Europa y 232 fabricantes industriales, sobre todo en Alemania, donde estos compuestos fueron identificados en plásticos, pesticidas y textiles impermeables.
Desde hace años se sabe que algunos ‘contaminantes perpetuos’ causan cáncer y problemas reproductivos, pero aún se sabe poco sobre su efecto combinado. Precisamente, un estudio publicado el miércoles en la revista Environmental Health Perspectives revela que la exposición a múltiples PFAS que se encuentran en el medio ambiente puede provocar trastornos del desarrollo, enfermedades cardiovasculares y variados tipos de cáncer.
Sin embargo, las emisiones de PFAS no están reguladas en la Unión Europea ni en Estados Unidos, pero la investigación recién publicada da a conocer “un amplio proceso de conspiración para diluir las prohibiciones propuestas en toda la UE”.
¿Europa toma ahora la iniciativa?
Recientemente se conoció que la Comisión Europea podría materializar la mayor restricción masiva de productos tóxicos de la historia, tras la propuesta conjunta lanzada por cinco países de la UE (Dinamarca, Alemania, los Países Bajos, Noruega y Suecia) ante la Agencia Europea de Sustancias Químicas (ECHA) para poner coto al uso de los compuestos perfluorados y polifluorados (PFAS por sus siglas en inglés).
La propuesta fue remitida a la Agencia Europea de Sustancias Químicas (ECHA) por estos cinco países a principios de enero, pero sus detalles se dieron a conocer hace apenas unos días. Está previsto que los comités de expertos de la ECHA realicen unas evaluaciones iniciales en marzo, si bien el escrutinio en profundidad puede llevar más de un año.
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Nicky Fusté 7 w
Es horrible. Luego enfermamos y "no sabemos por qué"